Consejos y Recomendaciones

De turista a peregrino...

Peregrino, vas a emprender un camino de vida. Comenzarás de turista. Verás paisajes increíbles, monumentos centenarios, ecos de nombres que saltarán a tu paso y que te recordarán que esta historia es milenaria. Pero si dejas que "el camino" entre en tu ser, pronto te convertirás en peregrino y comprenderás que el verdadero camino comienza en Compostela. Es difícil de explicar pero verás que todo enriquece tu ser y un manantial de principios y valores resonarán en tu interior.

Antes de emprender el camino....

Se supone que nos hemos hecho un pequeño reconocimiento de salud. Esto es muy importante, tanto o más que realizar entrenamientos durante varios días aumentando cada vez más las distancias a recorrer. No se puede iniciar el camino de Santiago sin ser conscientes de nuestros recursos físicos. En muchos casos una preparación deficiente arruinará nuestros deseos de alcanzar la meta. Santiago espera y por supuesto quiere que nuestro caminar sea en óptimas condiciones.

Comienza un nuevo día y...

.. Y no puedes pasar por alto tres aspectos fundamentales para tu seguridad...:
1-Si aún no ha amanecido debes utilizar reflectantes en la calzada.
2-En el camino SIEMPRE debes circular por el lado izquierdo.
3-NUNCA ocupes en grupo el espacio central de la calzada.

Si vas andando, por delante tienes una etapa de unos 25 o 30 Kms nunca debes olvidar estas 7 claves para conseguir el éxito en tu recorrido...

1-Sal antes del amanecer.
La distancia es larga y es mejor aprovechar las primeras horas del día puesto que hacia las 2 de la tarde el sol cae con justicia y andar nos costará el doble. Además hay que descansar y reponer energías para el día siguiente.

2-En tu mochila lleva todo necesario pero cuidado con el peso... no más de 6 kilos...
-Lo más importante es el agua. Puedes llevar alguna bebida isotónica o bien pastillas efervescentes para preparar este tipo de bebidas. 
-Loción solar con factores de protección altos. Son muchas horas a la intemperie y el sol abrasa y el aire ayuda a resercar y quemar la piel.
-Vaselina. Espárcela bien por los pies antes de cada jornada. Es un truco de caminantes veteranos que funciona a las mil maravillas.  
-Aspirina. Los que saben de andar dicen que es muy eficaz para reducir dolores articulares. Recomiendan tomar una al terminar el día. Nosotros te recomendamos que nunca la tomes con el estómago vacío.
-Bolsa de aseo. Utiliza envases pequeños y ligeros para tu dentrífico, cepillo de dientes...
-Chanclas. Imprescindible ducharte con ellas en cada sitio para evitar infecciones.
-Frutos secos. Aportan energía. Te vendrán muy bien en esas pequeñas paradas de cada etapa y te aportarán vitaminas extra.
-Dulces y chocolates.  Ayudan a evitar las molestas agujetas que se sienten al finalizar el día.
-Venda, tobillera y apósitos para ampollas. Ocupan y pesan poco y te pueden ayudar mucho.

3-Ropa y calzado.
-Lleva ropa ligera, que te quede bien holgada y por supuesto que sea transpirable.
-El calzado tipo bota, cómodo, transpirable, de tiro alto y asegúrate de que proteja bien el tobillo.
Nunca estrenes bota nueva en el camino, asegúrate de haber realizado diferentes entrenamientos con ellas y evita a toda costa las rozaduras.
-Calcetines. Dicen los expertos que es preferible utilizar dos pares. El primero de hilo fino para que se ajuste al pie perfectamente. El segundo grueso, ajustado a las botas y que no produzca arrugas que en pocos kilómetros te dejarían lleno de ampollas.

4-Cámara de fotos.
Muy recomendable. Asegúrate de cargar la batería antes de cada etapa. Verás y vivirás momentos únicos y qué mejor que poder capturarlos para contarlo después a tus familiares y amigos.

5-Guía o libro del camino.
Recuerda que es muy importante leer sobre cada etapa. Asegurarte del recorrido, de los lugares por los que vas a caminar pero también piensa que ese recorrido lo hizo un santo cientos de años atrás. Ábrete a lo que vas a sentir. El verdadero camino de Santiago provee fuerza interior, principios, valores y espiritualidad. Será muy positivo encontrarse con uno mismo cuando deja de lado el ruido de nuestro día a día.

6-Teléfono móvil.
No es imprescindible, es más algunos recomiendan no llevarlo durante el camino. Hoy en día en todos los pueblos hay teléfono.
No obstante, si deseas estar comunicado llévalo pero procura estar conectado con el recorrido y sus gentes. No te pierdas las bondades de cada etapa por estar hablando por teléfono, enviando mensajes o correos electrónicos.


7-Credenciales.

Y por supuesto no olvides tu credencial de peregrino. Los sellos que obtengas en cada etapa serán un magnífica recuerdo. Además, con ellos podrás pedir el certificado de peregrino en la Iglesia de Santiago al terminar tu etapa. Según reza la tradición, este certificado redime tus pecados. 

Otras recomendaciones...

1-Calentamiento.
Antes de cada jornada calienta pies y piernas durante unos minutos.
Aunque a primera hora estés más descansado evita un paso rápido. Mejor andar normal e ir animando poco a poco el paso cuando notes que tus pies, piernas y articulaciones van entrando en calor. Hay tiempo, disfruta y no te esfuerces que el camino no es una competición.

2-Pies.
Nuestros pies van a sufrir lo indecible. Es muy recomendable que:
-Antes de salir los masajees y untes con bien de vaselina. Asegura no dejar ni una arruga en tus calcetines y ajusta las botas sin apretar demasiado.
-Al llegar a nuestro fin de etapa. Ojo con las ampollas. Los trucos de la abuela son los que suelen funcionar. Se puede pinchar la ampolla con una aguja e hilo. Deja este para que libere todo el líquido y utiliza un apósito durante la noche. Te aliviará y será imprescindible para poder caminar en la siguiente jornada.
Al terminar la jornada es imprescindible poner las piernas en alto para favorecer el retorno de la sangre y renovar la circulación. Las cremas descongestivas pueden aplicarse con un ligero masaje reconfortante.

2-Alimentos.
Nunca realices una ingesta copiosa antes de la etapa.
Las comidas más fuertes es mejor realizarlas en momentos de descanso al terminar el día. En estos momentos el organismo agradece más la ingesta de proteína.
No abuses de las grasas. Intenta sustituir estas por fruta fresca y frutos secos. Tu organismo te lo agradecerá.